La UGT denuncia los hechos que sucedieron  en el Centro Penitenciario de Melilla, el miércoles 21 de mayo de 2014, cuando los funcionarios procedían a realizar el recuento ordinario de la población reclusa, un interno de origen camerunés permaneció inmóvil en su cama, sin incorporarse para el recuento. Los funcionarios, dado  que el interno tenía aplicado un protocolo de atención especial procedieron a comprobar su estado.

Momento en el que el  interno se incorpora de forma violenta y se abalanza sobre uno de los funcionarios, provocándole contusiones y heridas en el cuello, brazos y mano. Gracias a la rápida intervención del resto de funcionarios que se encontraban de servicio se pudo evitar que la agresión continuara. Como consecuencia de la agresión el funcionario tuvo que ser asistido de urgencia por el facultativo del centro penitenciario, para posteriormente, ser trasladado a un centro sanitario para su valoración y tratamiento.

La FSP-UGT quiere poner de manifiesto su preocupación por el hecho de que un interno con el perfil de tratamiento específico de quien se conocen antecedentes por resistencia a la autoridad, con un rasgo marcadamente agresivo y que necesita de un tratamiento psiquiátrico, que rechaza sistemáticamente, se encuentre en un módulo de convivencia normal donde no se reúnen las condiciones adecuadas para asegurar ni su propia integridad ni la del resto de internos y personal al servicio de los mismos.

 

Desde UGT solicitamos el traslado inmediato de este interno a un Centro adecuado a su situación y que la autoridades judiciales y penitenciarias actuen con condundencia en prevención de estos hechos para que no se repitan.